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Esperamos que encuentres algo de esperanza e inspiración en estas páginas. Aunque quizás sientas miedo de emprender este viaje hacia una nueva vida en sobriedad, probablemente te des cuenta de que no tienes otra opción que probar el programa de Adictos al Sexo y al Amor Anónimos. Recuerda, incluso si no hay reuniones en tu zona, no estás solo. Muchos de nosotros hemos logrado una vida sexual y amorosa sana y plena a través del programa de Adictos al Sexo y al Amor Anónimos. Tú también puedes.

La verdad es que sentimos que estamos “en camino” de algo grande. No sabemos a dónde nos llevará. Simplemente no sabemos cuáles son los límites superiores del funcionamiento humano saludable. En cualquier caso, tenemos la corazonada de que somos recién llegados a esta experiencia más grande de vida, a este ámbito más amplio de la vida. Si todo lo que somos capaces de hacer aquí es transmitirles nuestro sentido de esperanza y nuestra convicción de que una nueva vida de plenitud, riqueza y misterio los espera con seguridad a medida que avanzan hacia la sobriedad, entonces estamos cumpliendo con nuestra tarea.

Ojalá que cada uno de ustedes, al embarcarse en esta aventura, descubra su parte de la trenza dorada, esa maravilla que se despliega y de la que todos formamos parte. Estamos con ustedes. Todos somos viajeros conjuntos en el camino del destino y todos tenemos mucho que aprender unos de otros.

Adictos al sexo y al amor anónimos, pág. 159 © 1986 The Augustine Fellowship, SLAA, Fellowship-Wide Services, Inc. Todos los derechos reservados.

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